¿Has oído hablar del entrenamiento funcional ? En los últimos años ha aumentado la popularidad de este tipo de actividad física que permite trabajar progresivamente la fuerza, la resistencia, la movilidad y el equilibrio.
¿Qué es el entrenamiento funcional?
El entrenamiento funcional se caracteriza por adaptarse a los movimientos naturales del cuerpo humano. Por ejemplo, algunos movimientos cotidianos como saltar, agacharse o empujar pueden formar parte de este tipo de rutina. De esta forma se consigue un trabajo muy completo ya que interviene la actividad de todos los músculos y articulaciones.
Los ejercicios funcionales , además de ser globales, son de intensidad gradual. Sin embargo, las capacidades siempre se ajustan a nuestros objetivos. Eso sí, es importante que estas sesiones estén marcadas por un profesional. El entrenador funcional es quien se encarga de preparar una tabla de entrenamiento funcional adaptada a cada persona. Los ejercicios serán cortos y la intensidad afectará según el progreso de cada deportista.
¿Qué hace un entrenador funcional?
El entrenador funcional debe conocer la historia de la persona, teniendo en cuenta si sufre o ha sufrido algún tipo de lesión, por ejemplo. De esta forma, los resultados del entrenamiento funcional serán efectivos y se minimizarán los riesgos.
A partir de la recogida de los datos personales de cada deportista, el monitor establecerá diversos circuitos en los que se trabajarán las diferentes cadenas musculares. Además, quién determinará la intensidad, los intervalos de recuperación, así como los ejercicios de calentamiento y los estiramientos adecuados.
¿Qué son los ejercicios funcionales?
Como hemos comentado, los ejercicios de entrenamiento funcional son aquellos que se basan en el trabajo de fuerza-resistencia y que implican la participación de todos los grupos musculares. Algunos ejemplos son estos:
- Planchas frontales o laterales, apoyadas en manos o codos, para tonificar el core.
- Sentadillas para fortalecer cuádriceps, isquiotibiales y glúteos.
- Zancadas , otra opción intensa para trabajar el tren inferior.
- Dominadas , un excelente ejercicio que eleva el pulso y con el que se aumenta considerablemente la fuerza ejercida utilizando el propio peso corporal.
- Peso muerto y ejercicios con pesas para trabajar la cadena muscular posterior.
Beneficios del entrenamiento funcional
El entrenamiento funcional , gracias a sus características globales y su dificultad progresiva, resulta altamente beneficioso para la salud general. Si se adapta a tus propias necesidades, puede aportar todas estas ventajas:
- Ganancia de fuerza muscular.
- Mayor agilidad y flexibilidad, siempre que se incluyan estiramientos.
- Mejora de la postura corporal gracias a los dos puntos anteriores. Se trabajan todas las cadenas musculares y se tiene en cuenta el trabajo del abdomen y espalda.
- Reducción del dolor lumbar, siempre y cuando se realice una buena técnica con la supervisión de un entrenador profesional.
- Disminución de la grasa corporal al tiempo que aumenta la masa muscular.
- Aceleración del metabolismo, que favorece la pérdida de peso y el aumento de energía.
- Aumento del rendimiento deportivo.
- Mejora del equilibrio, la estabilidad y los reflejos, gracias a las características de los ejercicios.
- Mejora de la salud física y mental para lograr un mayor bienestar y calidad de vida.
Ahora que ya sabes un poco más sobre este tipo de actividad física, quizás quieras probar algunos ejemplos de ejercicios funcionales como los que mencionamos anteriormente.
El entrenamiento funcional en casa es una buena forma de empezar a notar los efectos positivos en nuestro organismo. Si te gusta no dudes en acudir a un entrenador o profesional del coaching deportivo para progresar con circuitos personalizados y adaptados a tus objetivos y necesidades.